Expresión Corporal

En las filosofías africanas, el tema de la identidad va ligado a la práctica ritual y a la expresión corporal, en donde la identidad individual parece estar pensada en los mismos términos que la identidad colectiva. El cuerpo, el rostro y la palabra son el lugar y el medio para fortalecer la individualidad humana, son la multitud de órganos que constituyen a una persona, la expresan vivamente o la traicionan.
Pocas personas saben que en África la fusión de la vida cotidiana con las expresiones denominadas artísticas es vital. Es por esta razón que la enseñanza de la cultura dancística y musical de un continente por demás relegado, se convierte en uno de los objetivos principales del grupo, ya que es poco el conocimiento con respecto a los pueblos afros y la cultura que los envuelve y caracteriza. Muchos de sus pueblos no deslindan una cosa de la otra, ni consideran la expresión corporal como un simple acto estético. El cuerpo es considerado como eje de expresión para la alegría, la tristeza, la nostalgia, la reflexión y un sin número de sentimientos y emociones. La expresión corporal es parte fundamental para los pueblos de agricultores, pescadores, recolectores y cazadores que habitan dicho continente, es la forma de mantener en la medida de lo posible su cultura ancestral, que al mismo tiempo, tiene que convivir con las nuevas formas de expresión, principalmente establecidas por los jóvenes.

Más que una sola danza

Se cree que los dioses -orishas- africanos aman la música y la danza y no aprueban las ejecuciones sin energía. La calidad y variedad de música en el continente negro reflejan sus profundas convicciones religiosas. Además, como tradición oral, los cantos junto con la música y la danza se encargan de transmitir el conocimiento filosófico a través de los individuos y las generaciones; esto permite la cohesión y fortaleza del grupo en sus creencias, tanto en la vida ritual como en la cotidiana. De hecho, los africanos ilustran su cosmovisión al decir: “cuando la música es energética hasta los enfermos quieren bailar”.      

Al ritmo de la vida

En los pueblos de África, la música y la danza son enlazados con su entorno natural armonizando cada etapa de su vida con rituales, ceremonias o celebraciones de todo tipo. La música es ejecutada por profesionales y es un elemento esencial en los eventos a celebrar, ya sean matrimonios, nacimientos o incluso funerales.

La música y los cantos giran en torno a diversos temas, pueden hacer referencia al trabajo diario o improvisar temas con diversos instrumentos, pueden ser cantos medicinales , intervenciones de músicos itinerantes y cantantes espontáneos o simplemente participaciones para divertirse. Las danzas resaltan la belleza y fuerza del cuerpo sin ser exclusivos, la participación colectiva es importante, ya que así podemos ver a mujeres y hombres de todas las edades participando y gozando de su movimiento corporal bailando al ritmo de la vida.

Una vista a lo que es la Danza Africana

La danza y música africana son conocidas gracias a que estas tradiciones se han pasado de voz en voz.  La música, compuesta de campanillas, tambores, laúd y flauta, tiene un gran papel dentro de este tipo de baile, ya que cada nivel y sonido tienen un significado diferente y profundo.

Lo que caracteriza este baile es que son movimientos simples que expresan mucho más que un simple movimiento corporal, cada brinco y cada giro hace alusión a una cultura que hasta ahora no conocemos a profundidad.